Acoger el amor en nuestras vidas para que este sea el que nos guíe en todas nuestras acciones, en nuestro día a día, buscar ser personas preocupadas por el bien común, que se sienten responsables del destino de toda la humanidad, personas dispuestas a “acoger el don del otro y ofrecerle algo verdadero». Esa es la invitación que nos hace Francisco y de la que nos hacemos eco en estas líneas de esta nueva semana
Nuestra casa común, el lugar en el que vivimos y nos desarrollamos como personas, no solo nosotros, no solo quienes nos han precedido, sino también aquellos que quedarán en la tierra cuando nosotros ya nos hayamos ido. Un regalo que se nos ha dado para cuidar y cultivar como buenos jardineros. Cuidar un regalo para darlo al otro, la gratuidad en nuestras vidas.
En el libro de «Alianza y Contrato» de Adela Cortina se expone dos clases de bienes, los necesarios para llevar una buena vida y los de justicia con una dimensión económica, ambos importantes según su explicación y a la hora de conformar nuestro sistema de convivencia tenemos que organizarnos de manera que lo económico garantice los derechos a la totalidad de la población y la libertad
Necesidades y deseos. Recursos suficientes para todos. Muchos de los deseos actualmente son miméticos. La satisfacción que recibo es auto-referente. El sistema economicista propone utopía de crecimiento ilimitado. En un mundo donde los recursos son escasos supone competitividad para poder satisfacer nuestros deseos sin una escala objetiva de esencialidad
Existen necesidades que se pueden objetivizar. Su caracterización puede se útil como herramienta para el análisis económico. Sobre todo están en la categoría de básicas y sociales y de la condición. Este conocimiento permite reconocer la necesidades básicas para todos según aspectos particulares y el Estado debe ofrecer un catálogo económico justo y digno que no tiene que ser de forma creciente. Para ello urge se establezca un diálogo público constructivo
Todos los años la Agencia Tributaria publica un breve informe con la cuantía que pagan por el impuesto de sociedades las empresas multinacionales españolas
La media que pagan es un 16,7% de sus beneficios a pesar de que el tipo de este impuesto en España es un 25%
La mitad de ellas pagan un tipo medio que está por debajo del 15%
Te propongo un test para que sepas si realmente estás preocupado por los resultados de la acción del gobierno (este u otro) en la sociedad, o hay otras cuestiones que te preocupan más…
Puedes hacer el test desde el vídeo o leyendo el texto que te pongo detrás, no te costará más de seis minutos y te puede ayudar a pensar sobre la realidad actual.
Artículo titulado «Rentas de ciudadanía. Justicia social desde el bien común» publicado en la revista Noticias Obreras, número 1592 de Febrero de 2017, pág: 19-26.
El Blog de Enrique Lluch Frechina 